La refutación de la teoría cuantitativa del dinero
DOI:
https://doi.org/10.52195/pm.v8i2.256Abstract
En las primeras páginas de su The Theory of Prices, Arthur Marget insiste en que los economistas tienden a confundir la ecuación cuantitativa —M*V=P*Q— con la teoría cuantitativa del dinero (Marget 1938, 9-39). Si bien, como asimismo sostiene Benjamin Anderson (Anderson 1917, 161), la ecuación cuantitativa es en realidad una identidad contable irrefutable que tan sólo pone de manifiesto que el conjunto de los pagos realizados en una econo-mía —M*V— es igual al conjunto de los cobros —P*Q—, la teoría cuantitativa asume la existencia de unas relaciones concretas entre las cuatro variables de la ecuación cuantitativa.
Aunque, como sucede con la teoría del capital, existen casi tantas teorías cuantitativas como economistas, Joseph Schumpeter, en su monumental Historia del análisis económico, tasaba en cuatro las proposiciones básicas que se encuentran presentes en cualquier teoría cuantitativa: a) la oferta monetaria (M) es una variable inde-pendiente de los precios (P) y del volumen de transacciones (Q); b) la velocidad del dinero (V) está determinada por factores ins-titucionales y, o bien no varía, o bien varía muy lentamente; c) la cantidad de transacciones (Q) no depende de la oferta mone-taria (M); y d) los cambios en la oferta monetaria (en M), a menos que vayan casualmente de la mano de cambios en la cantidad de transacciones (en Q), provocan variaciones mecanicistas en to-dos los precios de la economía, con independencia de cómo se haya producido esa variación en la oferta monetaria (Schumpeter 1954, 703).
En efecto, si algo pretende probar la teoría cuantitativa es que, invariadas las restantes circunstancias, un incremento de M provocará un aumento proporcional de P, y para ello resulta necesario asumir que M es independiente de V y de Q (y V y Q de M) y que el aumento de P es una consecuencia de M y no al revés.
Pese a la popularidad lograda por la teoría cuantitativa, las cuatro hipótesis de partida son falsas. No quiero con ello negar que, en general, los aumentos de M no se traduzcan en ciertos incrementos de P —como decía Hayek, «desde un punto de vista práctico, pocas cosas podrían ser más graves que el público de-jara de creer en las proposiciones básicas de la teoría cuantitati-va» (Hayek 1967, 3-4)—, pero en aras del rigor teórico es inadmi-sible que aceptemos a pies juntillas unos razonamientos muy de brocha gorda que nos ocultan las auténticas interrelaciones entre el dinero, el crédito y los bienes económicos. Por ello, en este ar-tículo me centraré en analizar y refutar cada una de las cuatro hipótesis básicas de la teoría cuantitativa.
References
ANDERSON, BENJAMIN (1917): The Value of Money. The Macmillan Company.
HAYEK, FRIEDRICH (1967): Prices and Production. Augustus M. Kelly, Publishers.
HUERTA DE SOTO, JESÚS (2011): Dinero, crédito bancario y ciclos econó-micos. Unión Editorial, 5.ª edición. Primera edición de 1998.
MARGET, ARTHUR (1938): The Theory of Prices. Prentice-Hall.
SCHUMPETER, JOSEPH (1954): History of Economic Analysis. Oxford University Press.